La última isla a la que vamos en Indonesia es Sulawesi, nombre exótico para una isla muy extensa y con muchas cosas que ver, nos tenemos que conformar con una pequeña parte en el extremo noreste que es muy famoso por lo especial de su buceo. En ese rincón de la isla vamos a visitar dos destinos, Bunaken National Marine Park y Lembeh. Lembeh es una isla alargada separada de Sulawesi por un estrecho que es famoso por la cantidad de ‘critters’ que se encuentran bajo el agua. ‘Critters’ es el nombre de una película de horror de los años 80 en la que los protagonistas son extraños y feos monstruos. También ‘critters’ tiene un sonido similar al de ‘creatures’ criaturas y que definen lo extraño de algunos de los peces e invertebrados que allí se pueden encontrar. El buceo que se realiza en esta zona recibe elnombre de ‘muck diving’ que a la vez significa buceo en lodo o en basura, en principio no suena muy apetitoso
Aterrizamos en Manado y un taxi nos lleva a la ciudad de Bitung que está en el lado de Sulawesi del estrecho. El aspecto del puerto es sucio y desvencijado. Allí buscamos un barco que nos cruce a la isla de Lembeh para llegar al Daniel’s resort que tenemos reservado. Nos cuesta encontrar un barco que acepte un precio razonable, pero al final lo conseguimos. La travesía nos da una perspectiva del estrecho.
La otra orilla presenta un aspecto bastante diferente, más atractivo.
Cuando llegamos al Daniel’s resort, no nos gustó nada, tenía un aspecto entre envejecido y deteriorado, pero cuando nos dieron la habitación fue el remate. Ahí va un detalle del espejo del baño y de una almohada. Era barato (32 € con las comidas incluidas) pero dejaba mucho que desear.
En fin que nos escapamos hacia una pequeña carretera que hay detrás del hotel a buscar otros resorts que estuvieran mejor y con precios asequibles. Las carreteras en estos sitios son muy simples y tienen pendientes elevadísimas de hasta el 30% en algunos tramos y con el calor y la humedad llegamos empapados en sudor al pueblo más próximo. desde allí por caminos dentro de la selva accedimos a tres resorts. Hicimos los caminos que recorren los empleados y son verdaderos barrizales muy resbaladizos por las pendientes que presentan, llagar por ellos es medio aventura. En fin los 2 primeros eran caros para la calidad que ofrecían, el tercero también era caro pero su calidad era bastante buena. Nos atendió un suizo, Thomas, que después de varios regateos y dado que estamos en temporada baja y con el hotel medio vacío nos hizo una oferta razonable para el alojamiento y el buceo, habitación de lujo con aire acondicionado y unos barcos y equipos para buceo francamente buenos. Así que nos llevaron en barco al Daniel’s, recogimos el equipaje, pagamos la noche que no íbamos a usar y nos fuimos. La primera vez que nos pasa esto en mucho tiempo. Vistas desde Bastianos, nuestro nuevo resort.
Bueno, a partir de aquí ya todo bien. Hicimos alguna inmersión en zona de arrecife, pero la mayoría se desarrollan sobre suelos arenosos oscuros y con bastantes restos de basura que los locales arrojan con frecuencia al mar. Algunos de los peces que vimos son comunes a otras zonas tropicales
También vimos gran cantidad de nudibranquios que significa branquias desnudas porque las tienen al exterior y normalmente tienen unos colores muy llamativos.
Otros son más difíciles de ver como algunos tipos de lenguados.
Pero lo realmente llamativo de Lembeh son las criaturas ‘critters’ ¿Ves las dos primeras en esta foto?
Vistos más de cerca se distinguen mejor. Son peces rana gigantes, al claro se le ven bien los ojos y un poco la forma de la boca, al negro se le ven un poco la boca y las aletas, pero están muy bien mimetizados con el fondo.
Hay otras especies de peces rana que son sorprendentes. El primero parece triste o fantasmal, no sabría decir.
Luego están los peces piedra, desde luego el nombre les viene al pelo, porque yo alucino de como Opo,nuestro dive master o guía de buceo los encuentra a la primera.
Hablando de Opo, ha sido un magnífico guía, no solo porque encontraba cosas imposibles, sino porque nos apuntaba los nombres de todo y era la alegría del barco siempre haciendo bromas y cantando. Ha sido un auténtico placer tenerlo como guía.
El entorno de buceo varía de zonas selváticas a buceo en muelles con barcos semihundidos o en las proximidades del hotel.
La constante es encontrar peces que siguen sorprendiendo inmersión tras inmersión, aunque hay que reconocer que en alguna inmersión no vimos casi nada, pero no es la tónica general. En las siguientes fotos pez gato, un pez ‘astrónomo’ y varios peces escorpión que pueden producir una picadura extremadamente dolorosa.
Erizos, estrellas, crustáceos como la Mantis gigante, gambas limpiadoras o cangrejos.
Peces aguja,tubo, más peces de colores como el baramundi, el mandarín, el bangay cardinal o el gunard volador.
Algún pulpo y sepia.
Y algún espécimen pendiente de clasificar
Nos costó decir adiós a Lembeh.